DIÁLOGOS - FEDERICO GARCIA LORCA
MADRID Del 10 de abril al 2 de julio 2008 - Jueves a domingo a las 21 horas
TEATRO DE LA PUERTA ESTRECHA Calle de la Cabeza 14
DIÁLOGOS nace de la idea de componer una dramaturgia que integre algunas de las piezas breves de Federico García Lorca que con este título genérico agrupan textos tan dispares como Diálogo mudo de los dos cartujos, La Doncella, El Marinero y El Estudiante, El loco y La loca o Diálogo de los dos Caracoles.
Una dramaturgia que agrupa estas piezas en un todo escénico, en una pieza teatral completa de sentido, argumento y estética, y no como piezas aisladas del puzzle lorquiano. El reto incluye la no utilización de textos que no sean del autor, estos es, utilizar parte de la obra dramática, poética y prosística de Lorca en su creación, y con el objeto de poner en marcha la esencia del mundo lorquiano en todas sus facetas.
La altísima calidad de los dramas y tragedias que Lorca escribe entre 1932 y 1936, no debe oscurecer cuanto hubo en ellos de compromiso con unas ineludibles circunstancias históricas. El teatro “imposible” lo era realmente y el autor hubo de actuar en consecuencia.
La gran crisis que padece toda la literatura europea al filo de los años treinta, se traduce en Lorca en una profunda renovación. El poeta se apropia la moral subversiva del surrealismo y acepta su invitación a las libertades imaginativas, escribiendo textos con una gran calidad en sus secuencias líricas.
El teatro de Lorca que menos se monta es el más vanguardista y controvertido. No es casual que las obras a las que nos referimos se hayan englobado con el título de Teatro Imposible.
La Niña de los Títeres, El Sombrerero, La de los Coturnos, La Domadora, el Ventrílocuo son algunas de las sombras que va trayendo el viento y arrancan sus DIÁLOGOS en medio de un paraje donde asoman las caretas del tiempo ido, el laberinto de las cruces y alguien que le quiere poner sordina al mundo.
Una dramaturgia que agrupa estas piezas en un todo escénico, en una pieza teatral completa de sentido, argumento y estética, y no como piezas aisladas del puzzle lorquiano. El reto incluye la no utilización de textos que no sean del autor, estos es, utilizar parte de la obra dramática, poética y prosística de Lorca en su creación, y con el objeto de poner en marcha la esencia del mundo lorquiano en todas sus facetas.La altísima calidad de los dramas y tragedias que Lorca escribe entre 1932 y 1936, no debe oscurecer cuanto hubo en ellos de compromiso con unas ineludibles circunstancias históricas. El teatro “imposible” lo era realmente y el autor hubo de actuar en consecuencia.
La gran crisis que padece toda la literatura europea al filo de los años treinta, se traduce en Lorca en una profunda renovación. El poeta se apropia la moral subversiva del surrealismo y acepta su invitación a las libertades imaginativas, escribiendo textos con una gran calidad en sus secuencias líricas.
El teatro de Lorca que menos se monta es el más vanguardista y controvertido. No es casual que las obras a las que nos referimos se hayan englobado con el título de Teatro Imposible.
La Niña de los Títeres, El Sombrerero, La de los Coturnos, La Domadora, el Ventrílocuo son algunas de las sombras que va trayendo el viento y arrancan sus DIÁLOGOS en medio de un paraje donde asoman las caretas del tiempo ido, el laberinto de las cruces y alguien que le quiere poner sordina al mundo.
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